¡Bienvenidos! Os presentamos el dibujo de Walt Disney, su evolución, su historia, sus personajes y técnicas cinematográficas.

lunes, 9 de diciembre de 2013

CAMEOS

Supongo que a estas alturas ya habréis comprobado que Walt Disney y su compañía tienen más trasfondo del que parece. Intuyo que ya habréis comprobado que las películas y los cortos que han lanzado al mundo no son sólo simples animaciones para divertir a mayores y pequeños. Y como creemos que ya estáis algo instruidos en el mundo Disney, más allá de lo que todos conocen, pensamos que ya es hora de abrir el cajón de eso de lo que muchos hablan en murmullos, comentando cosas aquí y allá, pero sin centrar la vista demasiado tiempo en ello… De hecho, alguno no se habrá dado ni cuenta y quizá ahora esté tan perdido como Alicia dentro del laberinto de la Reina de Corazones, pero como somos buena gente y ponemos título a las entradas, creo que ya debéis saber por dónde van los tiros, ¿no?

¿Qué es un cameo? Pues básicamente se trata de la aparición de un personaje ya conocido en otra película que, normalmente, no tiene mucho que ver con su primera aparición. Así que, pongamos ejemplos:

LA CAMIONETA: bien, recordemos durante un momento la primera película de Toy Story, ¿alguno se acuerda de los marcianitos verdes de tres ojos que adoraban a “El Gancho”? Ahora recordad la camioneta de Pizza Planet, el restaurante en el que vivían estos personajillos. Pues bien, esa misma camioneta la podemos encontrar, de nuevo, en una escena concurrida de la película de Cars; a través de la bolsa de agua en la que los amigos de Nemo (Buscando a Nemo) tratan de escapar al mar; tanto en la película Bichos, como en Monstruos S.A. (en las cuales utilizan el mismo fotograma); y en Wall-e, cuando Eva escanea los restos de la humanidad en busca de una planta.


EL ANCIANO: en la película Bichos, al final del cortometraje, podemos observar a un señor mayor medio calvo jugando contra una versión de sí mismo al ajedrez. Así que, ¿cuál es nuestra sorpresa cuando volvemos a verle en Toy Story 2, encarnando a un especialista de juguetes antiguos y raros?


LA BESTIA: nuestra Bestia con corazón de príncipe, no sólo aparece en la famosa película La Bella y la Bestia, sino que también podemos encontrarle representado en una figurita en el palacio del sultán de Aladdin.


SEBASTIÁN: el cangrejo más famoso de las películas de animación parece que no dedica toda su vida a vivir, como dice en su canción, “bajo del mar”. Hemos podido comprobar que tiene su momento de atención en Aladdin, cuando el Genio lo saca de un libro.


LA PELOTA: muchos pensarán que una pelota no puede hacer gran cosa, pero esa regla no puede aplicarse a la pelotita de Pixar, uno de los elementos que más vueltas ha dado a través de las múltiples películas de la compañía Disney (después de anexionarse Pixar). Aquí os dejamos algunas películas en las que ha aparecido: las imágenes 1 y 2 pertenecen a la película de Los Increíbles; la 3 y la 6 a Up, siendo la sexta una parte de la banda de scout del niño; las imagenes 4 y 5 pertenecen a la película de Toy Story; la séptima imagen es del cuarto de Boo, de Monstruos S.A.; y la octava pertenece uno de los cortos de las lámparas características de Pixar.


ESCOBAS: ¡Hasta las escobas son aventureras! ¿Os acordáis de las que bailaban junto con Mickey en Fantasía? Pues podemos ver alguna referencia a ellas en otras películas como Enredados.


MONSTRUOS S.A.: parece que el cuarto de la adorable Boo está lleno de recuerdos de películas Disney, podría decirse que es la Gran Fan, ya que, además de la pelota de Pixar de la que ya hemos hablado, podemos encontrar a Jessie, de Toy Story 2 y 3, a Nemo, de Buscando a Nemo, y al avión de Andy, el propietario de los juguetes protagonistas de la ya mencionada Toy Story.


Sabemos que hay mucho más cameos, somos conscientes, pero si los pusiéramos todos esta entrada probablemente no terminaría nunca y no queremos aburriros, que lo poco gusta y lo mucho cansa.

¡Esperamos que os haya gustado! Y ya sabéis, la próxima vez que veáis una película Disney estad atentos, nunca se sabe quién puede aparecer.